Presentación

La mejor manera de empezar a escribir un blog es presentarse, mi nombre es Xoelia, tengo 40 años y llevo 5 enferma, aunque desde muchos años antes ya notaba que algo no iba bien.

Todo cambio en mayo de 2011, a mi padre le diagnosticaron cáncer, y aunque él se recuperó a mi me supuso una situación de estrés excesivo. Debía preocuparme de mi padre, de mi madre, de mi hermano, de mi hijo, del trabajo… Y me olvidé de preocuparme por mi. Comencé a quedarme sin pelo, tanto que dos meses después me diagnosticaron Alopecia Areata Universal, y perdí todo el pelo y el bello de mi cuerpo. La parte buena, que me ahorro dinero y sufrimiento peluquero depilación.

En octubre o mismo año sufrí un Ictus, según los médicos tuve mucha suerte porque con 35 años suelen mortales. La cicatriz me ha dejado sin equilibrios, es imposible que vuelva a subirme a una bicicleta o a una escalera, y bajar escaleras se ha vuelto peligroso, por lo que las evito. 

Cuando comenzaba a recuperarme un día me desperté totalmente hinchada y con una erupción por todo el cuerpo, en urgencias no sabían que me estaba ocurriendo. A base de corticoides el brote paso, pero me quedaron dolores articulares crónicos. Después de pasear por muchos médicos un reumatólogo me diagnosticó artritis reumatoide y fibromialgia. Mi sistema inmunológico se ha vuelto loco y ataca mis folículos pilosos, de ahí que no tenga pelo, y mis articulaciones. Esperemos en que no decida atacar mas partes de mi cuerpo. De momento a base de inmunosupresores parece que no avanza, pero el dolor se ha vuelto crónico.

Supongo que habréis pasado alguna vez por una gripe, habréis sentido que os dolía todo el cuerpo, ese es el dolor que tengo yo a diario, y cuando tengo un brote la sensación es tener millones de agujas ardiendo clavándose en mi cuerpo.

Durante cinco años pudimos permitirnos que yo no trabajara, de hecho me han concedido una incapacidad total. HE dedicado estos cinco años a adaptarme a mi nueva vida. Pero este verano la situacion laboral de mi marido ha cambiado y no me ha quedarme remedio que buscar un trabajo. He tenido mucha suerte porque trabajo para un matrimonio de abuelos, les hago las cosas de la casa y la comida, pero sobre todo compañía. Las labores domésticas son poblanas, ya que ellos apenas manchan y me dejan ir a mi aire. Lo que peor llevo son las dos horas que voy a la noche para la cena.

He de decir que no podría hacerlo si mi marido y mi hijo no se ocuparan de realizar las cosas en nuestra casa, porque yo no podría con todo. Y tampoco es que no sea difícil, todo el que sufra de alguna enfermedad crónica sabe que unos días son malos y otros regulares, los días buenos han desaparecido.

Aunque nuestras familias nos apoyen, y os aseguro que la mía no deja de estar a mi lado en ningún momento, no es bueno que nos pasemos el día quejándonos o desahogándonos con ellos. Por eso decidí escribir la página de Facebook y ahora lo amplio a este blog, me sirve para alejar pensamientos negativos a la vez que espero que mi experiencia sirva para ayudar a otras personas.

Nos vemos por aquí. 😘😘🌹